S. VELERT PALMA La asociación de vecinos de es Fortí ha recogido 1.200 firmas en apoyo al derribo del Lluís Sitjar y la ejecución del proyecto presentado por el Real Mallorca que supone la construcción de equipamientos deportivos y un centro comercial en los terrenos en los que se ubican estas instalaciones en ruina. Este proyecto costaría entre 150 y 200 millones de euros. La entidad vecinal reclamó ayer al alcalde, Mateo Isern, que el Ayuntamiento, el Mallorca y los copropietarios del Lluís Sitjar se pongan de acuerdo para solucionar el problema de deterioro en que se encuentra esta infraestructura deportiva.
Isern visitó ayer el barrio acompañado de la concejala de los distritos Norte y Poniente, Belén Soto. Aseguró que el equipo de gobierno está a la espera de que el Mallorca presente un proyecto viable y que se disponga de un inversor con capacidad económica para ejecutarlo. El teniente de alcalde de Urbanismo, Jesús Valls, ha indicado en diversas ocasiones que la mejor opción para la ciudad sería el derribo del Lluís Sitjar y la incorporación de su solar en la trama urbana y en la Cuña Verde como espacio libre público.
Un acuerdo plenario adoptado por unanimidad a propuesta de los socialistas el pasado mayo permite permutar las instalaciones de es Fortí por el estadio de Son Moix. En el anterior mandato la exalcaldesa Aina Calvo ordenó a la propiedad el derribo de estas instalaciones por estar en situación de ruina económica pero el Mallorca presentó un recurso y se está a la espera de la resolución judicial. Cort tapió las entradas al estadio después de desalojar a las personas que lo habían ocupado.